Flexibilidad en la logística, elemento clave de la cadena de suministro

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En tiempos ventas omnicanal consumidores cada vez más exigentes, ser flexibles en la logística de las operaciones es necesario si queremos responder eficientemente a la demanda de los productos y no morir en el intento, tener la capacidad para poder responder a imprevistos sin alterar el buen funcionamiento de las operaciones internas de tu negocio es la tendencia a adoptar si quieres destacar dentro de la oferta del mercado.

Cuando hablamos de Flexibilidad en Logística, nos referimos a la capacidad que tiene una empresa o negocio de adaptar todos los procesos que conforman su operación a los posibles cambios que pueda sufrir la demanda de sus productos sin afectar su capacidad productiva y sin incurrir en aumento de los costos operativos.

La omnicanalidad abrió un abanico de opciones para que los clientes pudieran adquirir sus productos, lo que ha obligado a las empresas en especial a los retailers a adaptar sus operaciones a las exigencias de los clientes y es ahí cuando entra en juego la flexibilidad, poder responder efectivamente a un incremento de la demanda de los productos si generar caos en las operaciones, es parte de estar preparados y ser flexibles ante posibles eventualidades, para ello es necesario contar con la tecnología, preparación y comunicación efectiva tanto interna (equipo de trabajo) y externa (proveedores y partners logísticos) para poder hacer frente a cualquier desafío, sin que se afecte el buen funcionamiento de la empresa.

Para nadie es noticia que los hábitos de consumo han cambiado en los últimos años más aún después de la pandemia, es por esto que ser flexibles en la logística de las operaciones se vuelve fundamental, más aún cuando la competencia es tan feroz, sobrevivirá y se impondrán sobre los otros, aquellos negocios capaces de aplicar la flexibilidad logística para responder con rapidez a los constantes cambios de los clientes con la finalidad de ofrecerles una experiencia de compra satisfactoria.

Para poder poner en práctica la flexibilidad logística es necesario dejar atrás cualquier tipo de seguimiento o registro manual para dar paso a la digitalización y automatización, pues sólo con el uso de un software de gestión de almacén (WMS) o un software a medida que se adapte a los procesos particulares de la empresa se alcanzará la trazabilidad y escalabilidad necesarias que permitan predecir las posibles fluctuaciones del mercado y así estar preparados para responder a estas, manteniendo el stock necesario estimado y evitando caer en sobrestock o en roturas de stock ya que ambas situaciones alteran los costos internos y afectan los índices de productividad de la empresa.

Tipos de Flexibilidad en Logística

La flexibilidad logística no solo hace referencia a la capacidad de adaptación ante una determinada circunstancia si no también puede aplicarse a algún proceso específico de la cadena de suministro, estos son tipos de logística flexible más destacados.

Flexibilidad en el diseño de la cadena de suministro: consiste en diseñar posibles soluciones que permitan adaptarse y responder con más rapidez y eficiencia a una fluctuación inesperada de la demanda de productos, usar estrategias que permitan esta flexibilidad como el just in time.

Flexibilidad en la gestión de los recursos: tener un control de la ubicación de la mercancía (slotting) con la finalidad de garantizar su disponibilidad y poder hacer frente a la demanda de algún producto y evitar a toda costa una rotura de stock.

Flexibilidad en los procesos logísticos: es la capacidad de modificar algunos procesos en un momento específico para poder adaptarse a algún cambio en la demanda de productos.

¿Qué necesitamos para poner en práctica la flexibilidad logística?

Adaptar la cadena de producción y suministro de un negocio a un incremento de la demanda en un momento específico, sin que esto altere el buen funcionamiento de las operaciones ni requiera incrementos de gastos de operación, sólo es posible si ponemos en práctica las siguientes recomendaciones:

Big data y software especializado: contar con un software de gestión de almacenes (WMS) o un software personalizado es fundamental ya que permitirá analizar toda la data de las operaciones del almacén y así predecir las tendencias de consumo y diseñar estrategias para responder a diferentes eventualidades.

Automatización de procesos: automatizar los procesos ayudará a tener operaciones escalables lo que permitirá adaptarse a las fluctuaciones del mercado.

Logística externalizada: la exigencia de los consumidores ante los tiempo de entrega de sus productos ha hecho que los negocios decidan optar por tercerizar la logística de última milla de sus productos (3PL), pues ellos cuentan con la tecnología, herramientas, conocimiento y la experiencia para cumplir con los tiempos de entrega y adaptarse a cualquier cambio inesperado sin afectar la calidad del servicio.

Just in time: hacer uso de esta metodología permitirá adaptar la producción a la demanda específica lo que es ideal para la flexibilidad logística, poder contar con un plan de producción que se adapte a tus pedidos evitará los gastos que pueda implicar el sobrestock.

En conclusión un empresa o negocio cuyas operaciones cuenten con una logística flexible tendrá más probabilidades de destacar y triunfar dentro de un mercado tan competitivo, mientras más flexibles sea la logística de sus operaciones mayor será su capacidad de respuesta ante sus consumidores, lo que es fundamental para crear una buena experiencia de compra y fidelizar a los clientes.

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